CARTA PARA TÍ... QUE FUISTE MI BELLO AMOR

                    

 ¿Sabes amor? Hoy al contemplar el ocaso, caminando por la arena, con la fresca brisa refrescándome la piel, mientras el agua del mar se escurría entre mis pies, pensé en ti... en mí, en aquel amor tan grande que existía entre los dos.  Mientras el sol se ponía en el firmamento dando paso a la noche, fueron apareciendo las estrellas lentamente, igual que tu recuerdo que llegó a mí al estar en ese entorno que fue y será siempre el símbolo de aquél gran amor... el mar.

He suspirado tan fuerte que las gaviotas han volado raudas con esas alas blancas, mismas que tantas veces anhelé tener para volar hacia ti, pensé en los momentos compartidos donde yo era tuya y tú eras mío, en el inmenso amor que te entregué día a día durante tantos años, sin importarnos la distancia tan grande que existía entre tú y yo y me parece escuchar todavía cuando me llamabas tu chiquitica con ese susurro envuelto en ternura.

Eras magia en mi alma, volcaba en ti ese anhelo y me sabía amada, sé muy bien que tú siempre has dicho que no existe un día especial para festejar el amor, porque éste, está presente en todas las horas del día, en todo momento, pero hoy... hoy que se acerca este día tan especial, el día del amor, quise escribirte esta carta para decirte que a pesar que nuestras vidas se encuentran distantes en pensamiento y sentido, yo te sigo amando, tanto como el primer día, quizás sea la última carta en donde externé este sentimiento que taladra mis sentidos y me llena de melancolía porque ya no te tengo conmigo, porque sabes bien que mi corazón fue siempre tuyo, sin importarme nada más que conservar este amor que hoy sigue vivo y se niega a morir.

¡Y no pretendo con estas líneas que vuelvas a mi lado! Es tan sólo la nostalgia al mirar tantas parejas abrazadas, tantas miradas llenas de amor que me hicieron pensar en ti, en el ayer, en los instantes de locura que vivimos, en aquéllos versos entrelazados que juntos escribimos.  Quiero que sepas que aquél libro de poemas que me enviaste con aquéllas palabras tan bellas “Para ti con todo mi amor", escrito con tu puño y letra, única unión que pude tener físicamente de ti y que tantas veces mis dedos acariciaron, lo llevo siempre conmigo y podría decirte que memoricé cada verso, cada poema, porque en muchos de ellos me encontraba.

Quisiera decirte tantas cosas, pero se me agotan las palabras para describir mi sentir, mi tristeza, mi amor y aunque sé que pasaré este día pensando en ti, me llenaré de tu recuerdo, de ese ayer y del presente y después los meteré en ese baúl azul donde guardo las cosas bellas junto con esta carta que hoy te escribo, porque será, después de tanto tiempo el único lazo que me una a ti... porque son las últimas letras que escribí para ti.

Sólo recuerda que "La distancia es como el viento, porque agiganta los grandes amores" y aunque tu amor se extinguió con esta distancia, recuerda que aquél mundo, ése, nuestro mundo que construimos para nosotros dos, alejados de la gente, sigue ahí solo, sin ti... y sin mí.